Un individuo fue brutalmente asesinado en Trinidad, Jamaica, debido a una deuda pendiente con un destacado capo puertorriqueño.
El hombre, cuya identidad no ha sido revelada, fue objeto de represalias por parte de sicarios pagados por el capo.
La situación tomó un giro aún más perturbador cuando se filtró una fotografía del difunto mientras se encontraba en la morgue forense. Se sospecha que el personal forense fue sobornado para obtener la imagen, intensificando la preocupación por la infiltración de la corrupción en diversos ámbitos.
Trinidad es conocida por ser un punto estratégico en el narcotráfico internacional, donde, por varios años, ha estado presencia de narcotraficantes de Puerto Rico que utilizan este puende para la entrada y salida de drogas.
Este incidente subraya la complejidad de la red criminal en la región, evidenciando la necesidad de acciones contundentes para abordar la problemática del crimen organizado.