La esposa del joven Jan, quien fue asesinado en el Residencial Ramos Antonini en San Juan, Puerto Rico, se vio obligada a engañar a la organización criminal que controla el residencial. Según informes, afirmó falsamente que Jan había violado a una niña y lo denunció a un grupo de individuos peligrosos que controlan la zona.
Trágicamente, Jan fue posteriormente secuestrado por un grupo de sicarios, incluyendo a Jan, Cris, Jhonael (su hermano), y fue asesinado brutalmente. Los detalles específicos de su fallecimiento aún están siendo investigados