EXCLUSIVA: MUJER ENTREGO A EL NARCO ARMANDITO PARA QUE LE “DIERAN CALIENTE”

EXCLUSIVA | Traición, venganza y narco sangre: El asesinato de Armandito “AK”

Xposed Magazine confirma que Armandito “AK”, un narcotraficante de bajo mundo conocido en Cataño, fue asesinado con aparente complicidad de su propia novia, quien lo entregó a un peligroso bichote y matón local, identificado como “Bubu”. Este último ha sido protagonista en varias de nuestras exclusivas y es señalado como autor intelectual de masacres y asesinatos selectivos. xposedmagazinenews24.com+1

Según un informante cercano al caso, el móvil del asesinato fue una rivalidad amorosa cargada de veneno:

“Te voy a decir por qué mataron a alias Armandito. Todo fue por la mamá del bebé. Estaban en la playa y ella estaba bellaqueando con alias Bubu. Él le dio una pela a la tipa, él se enteró y se cagó. Resulta que el papá de la tipa pagó para que lo mataran. Esa misma mujer lo siente en el hospital porque se cansó de que anduviera dándole a su hija. Lo mató porque no solo estaba con Bubu… ¡también con alias ‘Pablo Diente’! Si sé de algo más, te aviso. Pero ella misma lo sentenció. Su papá es alias Orlando Mamero, de la vieja guardia del residencial Juana Matos.”

Este testimonio revela un entorno donde traiciones personales, apadrinamientos narco y venganzas familiares convergen para provocar muertes violentas e impunes.

Quién es “Bubu”

Alias “Bubu” ha sido identificado como uno de los sicarios más violentos de Cataño, protagonizando ejecuciones, masacres y enfrentamientos callejeros. Según información exclusiva de Xposed Magazine, “Bubu” estaría ligado directamente al asesinato de “AX” en Cataño y de otros incidentes en la zona metro. xposedmagazinenews24.com+1

Conclusión

El crimen de Armandito “AK” no fue una ejecución al azar, sino el resultado de una intrincada combinación de traición amorosa, venganza y poder narco. Su propia novia habría sido quien facilitó su final, presionada por su padre, una figura veterana del bajo mundo apodado “Orlando Mamero”. El método fue frío y calculado, una representación de cómo el crimen organizado manipula emociones y alianzas para resolver conflictos.